miércoles, 10 de junio de 2015

De ansias y sosiegos. De merendolas, de despedidas y regalos.

161. Historias mínimas.


Mis tesoros.


     Ayer terminamos, por este año, el taller de escritura creativa.
     El jueves pasado dimos las vacaciones en  las clases de todo en mi sede de Castilla- La Mancha.

Aquí puse el comentario.
http://pardocastroeloisa.blogspot.com.es/2015/06/de-ansias-y-sosiegos-hoy-no-es-fiesta.html

    En esta semana, daremos, a todas y todos, sendos diplomas en los que, aparte del nombre, apellidos y palabras serias y formales, debería constar todo el empeño, las ganas, la alegría, la constancia y el esmero con que, cada tarde, me regalan. A manos llenas.
Sin escatimar ni un ápice. Con generosidad.
     Hemos hecho fiestas para celebrar lo vivido y el comienzo de las merecidas vacaciones y, por si fuera poco lo que me ofrecen durante el curso, me colman de regalos.
     En las clases de todo, después de la merienda y de unos bailes que nos marcamos, me entregaron, con la sonrisa picarona y cómplice de la sorpresa, una cajita de caoba con un Ex_libris dentro. Un precioso ex libris que utilizaré con tanto cariño como el que dibujaban sus caritas satisfechas.

     En el taller, mis escritoras, después de leer unos acertados centones y aprovechar la clase hasta el último minuto, antes de irnos a una cafetería para brindar por futuras historias, me obsequiaron con un libro joya. Sí, ése que veis en la foto. Una delicia.

     Y ya me iba, contenta como una colegiala a casa, cuando unos amigos aparecieron con una cajita que albergaba un producto de nuestra tierra. Un placer para los sentidos. Una denominación de origen que "denomina" el placer de tenerlos.

   Este verano, además de descansar, pasear con Haro por todos los jardines de Babilonia, de sentarme en terracitas sombreadas, dejarme llevar por las aguas de los tres mares que nos abrazan y dormir a horas que no están encerradas en los relojes antiguos, leeré, escribiré, estudiaré todo con ojos desmesurados y codiciosos, para esparcir luego, sobre la mesa de clase, todo lo aprendido y repartirnos el botín en esas tardes azules que nos reúnen.
     Este verano, guardaré tardes de sol y noches de luna llena para cuando nos haga falta. 

Imagen tomada de la red.

      Os hablaré de los centones que pergeñaron mis chicas escritoras. Os hablaré de las jornadas culturales y de la entrega de diplomas.
      Pero será otro día. En otra entrada de este blog, que es el tuyo.
      Os hablaré. Pero ahora me voy con La sirenita.
     En la primera hoja ya luce, elegante y cárdeno, el sello de mi ex libris.
    Me voy a leer, con un trocito de queso manchego entre los dientes y una copita de mistela en el alma.
      Por mis amigos.
      Si gustáis?

  


4 comentarios:

  1. Cuanto trabajo te va a costar estar durante tres meses sin respirar la atmósfera de ese taller en donde se aprende a volar con alas hechas de sueños y a nadar en zafiros y esmeraldas tallados por la imaginación; pero, sobre todo, que la vida puede ser estupenda cuando se llena con minutos de amistad y la amistad maravillosa si se adereza de literatura y poesía. Feliz verano.

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    1. Pero emplearé el tiempo libre, además de para pensar y estar masticando la soledad, que tanto me gusta, para llenar de nuevo la bolsa y compartirla luego con mi gente. Tú estás entre ellos. Cuento contigo para el después. Un abrazote.

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  2. Puedes explicarme ¿Cómo puede relajarse alguien, con esto?. Quería llenar este verano mi canasto de cosas aprendidas, de sueños, de nuevas ilusiones, escribir y escribir sin pausa. Creo que solo acabaré llenando el fondo, no voy a poder con tanto. Me ha encantado. No sé que palabras decir. ¡ feliz verano!. Nos veremos. Besos lunáticos.

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    1. A veces, sólo con el fondo de nuestra mochila, es suficiente. A veces, con poco, se puede describir el todo. Y tú sabes. Un abrazo. Lunático.

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