sábado, 28 de noviembre de 2015

De poemas contra la rabia, de poesías de amor, de versos llenos de respeto y risas. Mis viernes poéticos.

332. ¡Qué tarde, por Dios, qué arte, qué banquete de poesía!

Buenas, corazones.

Poesía de los viernes.
Viernes de poesía.
El escenario preparado.
La vela iluminando los mensajes y la esperanza.




Todo el salón lleno de hombres y mujeres que aman los versos y repudian la violencia.
Que tienen ganas de poematizar los malos modos.



El hombre que me ame

deberá saber descorrer las cortinas de la piel,
encontrar la profundidad de mis ojos
y conocer lo que anida en mí,

la golondrina transparente de la ternura.



El hombre que me ame
no querrá poseerme como una mercancía,
ni exhibirme como un trofeo de caza,
sabrá estar a mi lado
con el mismo amor
con que yo estaré al lado suyo.

El hombre que me ame
no dudará de mi sonrisa
ni temerá la abundancia de mi pelo,
respetará la tristeza, el silencio
y con caricias tocará mi vientre como guitarra
para que brote música y alegría
desde el fondo de mi cuerpo.

El hombre que me ame
podrá encontrar en mí
la hamaca donde descansar
el pesado fardo de sus preocupaciones,
la amiga con quien compartir sus íntimos secretos,
el lago donde flotar
sin miedo de que el ancla del compromiso
le impida volar cuando se le ocurra ser pájaro.


La tarde de este viernes hermoso se dibujó redonda.
Y acabó con un regusto a caramelo de menta y olor a albahaca.
Gracias a todos los asistentes por acudir a la llamada.

Con los versos de Gioconda_Belli, os dejo un beso y un abrazo.
Mañana os espero aquí.
Os quiero ver a todos.




6 comentarios:

  1. Mi corazón estuvo allí. Mi solidaridad está con "ELLAS". Abrazos enormes

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es que hay muchos hombres, muchos, que merecen la pena. Tú estás entre ellos. Un abrazo grande.

      Eliminar
  2. Ella leyó un poema y silenció la pena. Me imagino que la tarde poética, fue estupenda, como siempre. Reivindicativa en un día de lucha y solidaridad. Gracias por ese acto y mi respeto.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias también a tí, que sin poder estar, estuviste. Un abrazo. Ya queda menos.

      Eliminar
  3. Tarde sensible, emotiva y triunfante. Abrazos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Se presentaba solitaria y otoñal y al final salió el sol y hubo gentío en la plaza. Abrazos más estrechos.

      Eliminar