viernes, 18 de diciembre de 2015

De ansias y sosiegos. Pronto será oro el membrillero.

352. Parte de su alma herida voló a Nueva York, allí viajaré en breve, para respirarla entre los rascacielos.



Buenos días amigos.

Esta mañana he desayunado con una amiga especial.
Hemos recorrido Leganés.
He llegado a casa cargada de trastos, figuritas, pañitos de encaje, un cuadro, algún libro, ceniceros..., como apoyo de un rastrillo solidario.
Ahora acabo de poner en la olla los apaños para una fabada.
Por la noche tengo la cena de hermandad en mi casa cultural castellano manchega.
El otro día otra fiesta en el taller de escritura.
Ayer la cena de la U.P.L.
O sea poniendo todos los medios necesarios para conseguir la añorada cintura de avispa.

Me han preguntado, en todos estos eventos, dónde comprar mi poemario Pronto será oro el membrillero.


Yo aún no tengo ejemplares.
Si lo queréis para vosotros o como regalo de Navidad, lo podréis encontrar en la librería Punto y Coma, aquí en Leganés, en la calle Teniente General Muslera, 1.
Fernando, librero especial, atento y conocedor de todo lo relacionado con la literatura y las palabras os atenderá gustoso.
Os dejo un adelanto?
Mirad:



Cunde el olor del membrillo,
salí al porche a su reclamo.
Estaba sentado, con los ojos cerrados,
con toda la luz reflejada
en sus dudas.

Dejé el paño de cocina
en la barandilla
y comencé a contarle una historia.

Siempre le  ha  gustado.

Le hablé de un rincón
de Babilonia.
De leyendas.
De él y de mí.

Le conté, por si no recordaba,
nuestra noche de bodas,
le hablé de muchas noches,
del mordisco leve al membrillo
antes de acostarme,
del perfume del beso,
le hablé de la luz.


Pero dormía.

Leed los poemas despacio, imaginando los rizos del destino, ésos con los que no contábamos, ésos que se meten, ladinos, en los ojos y nos nublan la razón y los sentidos.
Esos que nos dan la vuelta y nos dejan desnudos ante el frío de alguna mañana.
Esos que, a veces, nos matan. 
Espero que os guste la historia que se esconde entre sus versos.
Es real. Duele.

Creo que ya están listas las judías.
Me voy a abrir una botellita de vino tinto.
A vuestra salud.
Hasta mañana príncipes. Y princesas.










6 comentarios:

  1. Solo te falta ir a comer con La Virgen, buena marcha, y a lo mejor te tocó la cesta. El libro lo releo cada noche, cada noche, mas me gusta. Abrazos, poeta.

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    1. No me toca nada, en eso no soy afortunada. Me alegro que te esté gustando. Abrazos. No sé qué poner hoy en el blog.

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    1. Y aunque no lo tenga, querida amiga. Nos vemos. Ayer se quedó corto el encuentro. Abrazos libres.

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  3. Pon música de la que tu sabes, un poema de tu cosecha, y recuérdanos que un fraile dijo, que las promesas deben cumplirse. Adórnalo¡. Lo que escribas será bueno. Besos.

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    1. Pues salió. Siempre sale. Ya sabes, la imaginación... esa loca de la casa. Un besote.

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