miércoles, 20 de abril de 2016

Memorias de mi vecina. Capítulo tres.

    
HISTORIA DE MI EXISTENCIA.
por Pilila Fernández de de Blas.

     Hoy no tengo demasiadas ganas de escribir, tengo mucha plancha y la encimera de la cocina está algo pegajosa, me voy a dedicar a ello hoy sin falta. Pero como la escritura de mi libro de memorias me corre prisa, me he prometido no dejar pasar ni un día sin adelantar algo.
Veamos:




 "Nos fuimos de viaje de novios a Cartagena, a ver a su madre, y nos tuvimos que volver a los dos días porque mi suegra y yo no llegamos a congeniar demasiado;  las dos queríamos excesivamente al Nicolás y nos resultó totalmente incompatible la convivencia en la misma casa.
     Regresamos un poco disgustados a nuestro hogar, un piso en Parla que había heredado al morir mi madre y en el que fijamos nuestra residencia habitual, y fue entonces cuando mi Nicolás me exigió muy taxativamente que debía dejar el trabajo de publi-relation en la taberna, porque decía, dijo, que había observado ciertas irregularidades en el trato del dueño de la misma con mi persona, y que consistían en que no le parecía bien que cuando pasaba el susodicho por detrás de mí y, debido a lo reducido del espacio entre el mostrador y la cafetera, y, para no caerse, se agarraba con fuerza a mis tetas. 
     Yo, la verdad, no veía mala intención en ello, pero Nicolás decía que los ojos que ponía mi jefe al realizar este acto reflejo no eran del todo normales.
    Así que dejé la vida laboral y me dediqué ex profeso a mi marido y mi casa y a la ardua tarea de encargar un niño, a la que nos entregamos en alma y cuerpo desde el primer día".

     Tengo que dejarlo aquí, hoy tengo que hacerle a mi Nicolás unos judiones y ya tengo la plancha caliente para planchar todo el ropel que he ido acumulando en estos días de escritura.

    Es muy difícil ser escritora y artista cuando tiene una que dedicarse a estas tareas tan ordinarias. 

*La mujer que llora, Picasso (1937)



4 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Es que tenía prisa la pobre. Ya escribirá más de su interesante vida cuando tenga más tiempo. Es lo que tiene ser escritora maruja. Un besote artista.

      Eliminar
  2. Lo de escritora maruja lo tiene superado, que deje la plancha, lo que sea, pero de escribir no. Me parece bueno, bueno. Un abrazo sonriendo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Le daré tu recado, ella no tiene internet, bastante tiene con las cuartillas. Un beso de parte de las dos.

      Eliminar