jueves, 7 de enero de 2016

Busco.


Se resiste la mujer a la pérdida.
A la nostalgia de los deseos que no encontraron hueco.
Al tren huido.
Al murmullo del odio.
Al rechinar del tacto en la garganta.





Busco en tu espalda
todas las tardes vacías,
en el hueco de tu axila
los miedos,
en la nuca,
esos deseos repentinos
que aún revolotean
por las esquinas de los días
feriados.

En las manos abiertas,
las promesas olvidadas.

Busco, entre las cortinas
lívidas de la alcoba,
marcas delatoras entre los muslos,
quimeras en los ojos,
certezas.

Busco un lunes que me entregue
el cáliz.

La panacea.






*Imagen tomada de la red.

6 comentarios:

  1. Ese remedio es difícil de encontrar. Es más, no creo que exista la panacea. Pero con lo constante que eres, tal vez la encuentres. si eso ocurre, compart.

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    1. Ahí andamos. Ya te cuento. Un abrazote y unas cañas pendientes.

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  2. Todo existe, todo es posible. Solo es cuestión de pensarlo, desearlo y buscarlo

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    1. Más o menos, querido amigo, más o menos. Yo deseo darle a usted un abrazo de año nuevo. Un beso grande para Cathy.

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  3. Buenos días. Un placer reencontrarme con el blog, me quitaba el sueño. El que busca encuentra, a veces tenemos lo deseado en la vuelta de la esquina y se nos pasa de largo. Un abrazo de invierno.

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    1. Es que la mano me pedía seguir incordiando. Se me ha pegado el bolígrafo y no consigo despegarme de él. Voy a intentar relajarme. Un abrazo de cuatro estaciones.

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